domingo, 3 de junio de 2007

AUSENCIA


Hoy amo a una mujer que no está cerca,
que ni siquiera está lejos. Simplemente no está.

Y si existe, estoy seguro que no ha escuchado mi voz,
mi desorden o mi grito.

Y no queda mas que inventar que no estoy solo,
que el amor existe y que algún día dejare de inventar.

1 comentario:

tripsina dijo...

Hoy amo a un hombre que no está cerca, que nisiquiera está lejos. Simplemente no está.

Y estoy segura de que existe, lo he visto, lo conozco, estoy segura de que no ha escuchado mi voz, mi desorden o mi grito.

Si tan solo abriera sus ojos, estirara su mano, se daría cuenta de que aquí estoy. La mujer en la que ha entrado hasta sus entrañas, que conoce y lo conoce, que pelea sus batallas y gana sus guerras, que ama y desea. La mujer que disfruta y goza, la que rie de sus torpezas y llora sus errores, la que ha amado al hombre y dado a luz al ser más hermoso, la que duda pero siempre cree en si misma, la que se equivoca pero siempre crece. Si solo quisiera ese hombre ver, explorar, descubrir, encontrar una vez más.

Ese hombre soñador por profesión máxima, audaz en sus pensamientos y desiciones, que vive y debora al mundo que le queda chico, que es bruscamente tierno, secamente cariñoso. Ese hombre que ve tu interior cuando te mira a los ojos, el que no pierde sus valores o principios ante las circunstancias, que emana fuerza desde su corazón. Ese hombre que sabe que hay más de 1000 formas de pelar a un gato y sabe triufar sin dejar nunca de soñar. Si tan solo mirara una vez más.

No está cerca, ni está lejos, pero ahí está, rasgando mis entrañas, llenandome y vaciandome. Si tan solo abriera sus ojos y estirara su mano. Si tan solo mirara una vez más.