martes, 8 de julio de 2008

ADIÓS




No sé si ustedes alguna vez vivieron un momento en el que de verdad vieron como su vida cambiaba. Conocí a un chico que un día pasó por un momento como ese. La fotografía registra el instante en el que decidió que hacer con su vida. Dejó la escuela y la mayor parte de lo que tenía y se fue a otro lugar con una idea en la cabeza. El último día que estuvo en su ciudad natal, fue a la playa se sentó y escribió dos cartas, una para él, para leerla algunos años después y otra para el resto de ustedes. Abajo está una de las cartas, la que escribió para ustedes.

26-10-2006
Adiós.

Éste es. Éste es el adiós. Disfrute mi estancia aquí y estoy agradecido por cada experiencia que viví aquí. Estoy contento con mi pasado y con lo que soy, pero verán, hay una cosa que llaman Felicidad de la que he oído hablar todo el tiempo pero que no creo haber visto tan frecuentemente. Qué es exactamente, no lo puedo explicar, pero estoy seguro de que cada persona tiene una manera diferente para alcanzarla. De la misma forma creo que cada uno tiene su forma de verla, con sus propias complejidades, substancias y texturas, pero me gusta pensar que el punto en común sería algo como esto:

¿Puedes mirar en tu vida y en la gente a tu alrededor y saber que aquí es, que no hay otro lugar en donde deberías estar y que aquí es donde quieres quedarte? ¿Puedes despertar cada día con una sonrisa en el rostro, y sentir la emoción al irte a dormir, sólo porque sabes que vas a despertar otra vez aquí?

No puedo en verdad poner en palabras lo que nos hace felices, o en que consiste la felicidad. La verdad es que no lo sé. Pero lo que si sé es que tenemos que entender qué es lo que no nos hace felices y alejarnos de todas y cada una de las cosas que nos llevan a una vida sin la posibilidad de esa sensación. No puedo explicarle a nadie las razones para dejar la escuela, o porque me voy persiguiendo sueños que cualquiera tiene, cuando cualquiera diría que son inalcanzables. Yo sólo sé en mi corazón qué es lo mejor para mi y que no me permitiría quedarme en una situación en la que la mayoría de la gente se hunde, desespera, enreda y muere. Mi consejo para los que leen esto no es que sigan mis pasos, o que tomen riesgos o se aventuren. En lugar de eso yo les diría que miren en su propia vida y se respondan sinceramente si es lo que quieren para sí mismos, si la respuesta es no, entonces ya eres uno de los que se muere en vida. ¿Puedes iniciar las acciones para prevenir que tu vida sea un desperdicio? ¿Puedes sentirte no sólo contento, sino completo, pleno con tu pasado, presente y futuro? ¿Puedes tomar el espejo, mirarte y que te guste la persona que ves, porque es una persona verdaderamente feliz?

Yo si puedo. Porque sé quién soy y sé que es lo que quiero y nada me detendrá.
Apenas voy empezando. Va a ser un buen viaje.

PODRÍAS HABER SIDO TÚ



...el aire de tu casa...

Un día de pronto te encontré. Llegaste de repente a mi vida y con tanta facilidad entraste a mi corazón que me sorprendí...la charla inicio con sonrisas ligeras y despreocupadas que dejaron poco a poco al descubierto el alma de ambos. Parecía que eramos lo que buscamos o deseamos de la vida, una plática intensa y profunda, un desayuno sano y divertido, una tarde compartiendo toda una vida...estabas ahí y te había conocido. Pero aunque podrías haber sido tu, las lineas de tu vida ya estaban escritas en otra historia que no era la mía y muy a mi pesar amé conocerte y perderte sin tenerte....irónico y cierto pero estabas ahí sin la libertad de compartir una vida junto a mi.

Podrías haber sido tú, pero ahora sé que es genial saberte vivo, compartiendo este tiempo, este espacio y mirar desde lejos lo hermoso que hay en tu interior...tu corazón.

Yadira

¿RENOVARSE O MORIR?



...Vuelo 239 con destino a ningún lugar,
favor de saltar por las ventanillas...

gracias...

Es en días oscuros y en noches claras cuando se percata uno de la inmensidad del horizonte. Es entonces que los destinos se hacen infinitos y las posibilidades se antojan eternas. El tiempo pierde su medida tradicional y las distancias pierden todo sentido y respeto. Es entonces que el viento arrastra los pormenores superfluos y deja las cosas de fondo, las que han dejado hondas huellas y cimientos suficientes para que al desnudar el alma no pierda forma la esencia de nuestro ser.

Entonces surgen las verdaderas preguntas que forjarán los futuros ayeres de nuestro camino: ¿hay direcciones correctas? ¿hay errores irrevocables? ¿estamos realmente solos, o realmente acompañados?

¿Qué quise de mi vida? ¿Qué pasado quiero mañana? ¿Qué tanto puede repercutir una palabra, un soplido ínfimo con un significado etéreo?

¿Es acaso ésta, la despedida que me hago a mí mismo al final de un camino? ¿Son acaso estas líneas el inicio de un vuelo que no pretende ser eterno ni de tardío aterrizaje, sino simplemente un vuelo, un medio para despegarse de lo habitual y que lleve a una parte nueva el conocimiento y experiencias viejos?

Hoy decido partir y digo no adiós, sino hasta luego. Sí... amenazo con volver, más fuerte y más sabio de lo que hoy considero que soy. ¿Volver? pero si volver implica regresar al mismo sitio! aaahhhh!!!... no es una cuestión espacial, ni espacio-temporal, es una metáfora... engañosa, como lo es el destino y las razones que hacen pensar en él.

¿Arriesgado? No, porque nada se está arriesgando... no se puede poner en juego lo que no existe, ni se corre el riesgo de perder algo que no se tiene. ¿A donde partes, si en todos lados encuentras las respuestas -o la omisión de las mismas- a tus preguntas, balas que matan falsas amistades, que cortan mentiras y cercenan vanidades?

El cielo yace hoy a mis pies recordando que representa la falsa frontera de un mundo regido por leyes que nos hacen esclavos, porque están pensadas para hacernos sentir que hay un esquema único y una salida óptima, cuando en sí afuera hay mucho más que sólo lo que se percibe desde la prisión de la diaria vida.

Gracias amigos, gracias amigas, gracias hermanos y hermanas, que con cada frase, cada palabra, cada instante, han contribuido a hacerme crecer. Cada experiencia a su lado me recuerda que hay más por vivir que lo que se considera vivir. Gracias enemigos y enemigas, hipócritas y aventajados de todo calibre, que ustedes son quienes me han enseñado a defenderme, a jugar este ajedrez sociopolítico que me hace hoy un poco más difícil de engañar que ayer.
Gracias mentiras, por obligarme a construir una verdad más cercana a la realidad que no dependa de falsas vigas para sostenerse.

Gracias a quienes me han dado amor, amistad y apoyo, porque sin ello hoy sería más duro y frío de lo que es saludable ser. Y gracias a los que me han negado lo anterior, porque por ustedes es que hoy soy lo suficientemente duro y frío como para evitar caer en depresiones estúpidas.

Gracias mediocres, cretinos, vividores, espurios, falsos amigos, porque sin ustedes no tendría hoy el coraje de terminar con su existencia, situación que me lleva a buscar nuevas fronteras. Gracias a los que no creen en mí, porque me convierten en el único loco que se atreve a desafiarme y llevarme lejos.

Rock Cocker

viernes, 4 de julio de 2008

EL CORAZÓN DE LAS COSAS



...Gracias...

Hoy recibí una llamada que no quería oír, pero que sabía que llegaría.
Una verdadera y vieja amiga de los dos hablaba en el teléfono.
Me dice que encontraste a alguien para ti. Y pensé en toda la mala suerte y los problemas que atravezamos, en como me perdí, en como te perdiste tu también.
¿Qué son esas voces afuera de las puertas abiertas del amor,
que nos hacen desechar nuestra alegría y suplicar por algo más?

Ahora estoy aprendiendo a vivir sin ti... pero te extraño a veces.
Y conforme más conozco, menos entiendo las cosas que pensé en algún momento que sabía. Estoy aprendiendo desde cero otra vez.
Intento llegar hasta el corazón del asunto, pero mi voluntad flaquea y mis pensamientos parecen dispersos, no puedo enfocarme pero creo que en el fondo, el asunto está relacionado con el perdón...perdón incluso si ya no me amas más.

Son tiempos inciertos de anhelos sin definir y gente llena de ira. Todos necesitamos un poco de ternura, si no, ¿como puede sobrevivir el amor en una era como ésta, tan poco agraciada? La confianza mutua y la valoración individual que llevan a la felicidad, creo que son efectivamente las cosas que matamos, y el orgullo y la competencia no pueden llenar éstos brazos vacíos. Los esfuerzos que pusimos entre nosotros, sabes que no me dan calidez.

Hay gente en tu vida que viene y se va, de la que te decepcionas, ya sabes, que te hiere a ti o a tu orgullo. Es mejor dejar esas cosas en el pasado, porque la vida sigue y si continuas cargando ese enojo, te devorará las entrañas.

Ahora estoy aprendiendo a vivir sin ti... pero te extraño a veces.
Y conforme más conozco, menos entiendo las cosas que pensé en algún momento que ya había resuelto. Tengo que aprender desde cero otra vez.
Intento llegar hasta el corazón del asunto, pero todo es tan cambiante y mis pensamientos parecen dispersos, no puedo enfocarme pero creo que en el fondo, el asunto está relacionado con el perdón...perdón hacia mi, perdón hacia ti. Perdón incluso si no me amaste.

Don Henley